¿Cómo terminar lo que empecé?
Este artículo fue traducido de nuestra edición en inglés.
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Un inventario de proyectos, iniciativas y objetivos que nunca se completaron no te llevarán al éxito. Aprender a terminar las cosas es una de las mejores lecciones que experimentarás como emprendedor. Todos los días tratas de mantener un balance para tener tu vida profesional y personal en orden, pero a veces necesitas enfocarte en una cosa para que se complete o arriesgarte a tener tareas incompletas. Termina lo que iniciaste con estos cinco pasos:
1. Decide terminar. El primer paso para acabar es tomar la decisión de que, sin importar que, esta tarea o proyecto no se retrasará más. Convéncete de que alterarás tu comportamiento y completarás lo que comenzaste. A veces esto querrá decir que dirás que “no” a ciertas cosas para que nunca se queden como pendientes, esto hará más fácil eliminar el trabajo innecesario.
2. Haz un plan. Sabes que quieres terminar algunas tareas, pero, ¿cuál es el plan? Separa tus pendientes en los que se pueden hacer, en los que requieren medidas de acción diaria o si es algo que puedes terminar en un día, hora por hora. Puedes hacer un plan para crear límites en un calendario, de esta forma tus empleados y familia no podrán interrumpirte.
3. Comienza. Hiciste un plan y lo dividiste en varios pasos para que puedas completarlo. El siguiente paso importante es comenzar. No te esperes hasta la mañana siguiente o hasta la comida, empieza ahora. Aborda el primer paso en el plan y no dudes en iniciar.
4. Crea fechas límite. Tu plan debería incluir fechas límite. Comprométete con ellas. Mucha gente no termina lo que empieza porque encuentra excusas. Algunos días te desvelarás, te saltarás la comida o llegarás más temprano para completar los pasos de tu plan de acción. Haz lo necesario para terminar y seguir adelante hasta completarlo.
5. No sólo termines, complétalo. Haz tomado la decisión, hecho el plan y haz continuado para ver el proyecto terminado. Se siente bien quitar un gran peso de encima pero hay un último paso que no debes olvidar: completar la tarea. Cuando un pendiente está terminado, asegúrate que se haya guardado y compartido correctamente.